Joanny aún vive con el miedo a cuestas. Ella nació en Venezuela, en un barrio pobre. Junto con sus hermanos menores, creció al lado de sus padres, dos miembros de la Policía de ese país. La joven guarda buenos recuerdos de su hogar, a pesar de esas noches sin cena, en las que tenía que cerrar los ojos sin probar bocado.
La violencia se respiraba en la calle: fue testigo de actos crueles, pero a pesar de la inseguridad que había en el barrio donde vivía, Joanny estudió en la escuela y en el liceo. Todo fue normal hasta que cumplió 17 años y decidió irse a Colombia, a casa de una prima.
“Tuvimos una buena amistad, ella se ganó mi confianza, pero luego vino la pesadilla”, recuerda Joanny.
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Y el engaño siempre comienza con una atractiva propuesta de trabajo, un contrato fuera del país y la promesa de convertirse en una mujer exitosa. “Me dijo que conocía gente en Perú y que me dedicaría a vender ropa de marca, con una buena remuneración”.
El desengaño
Hubo otro gancho todavía más atractivo: viáticos, pasajes y un adelanto. Cuando llegó a Lima, se enteró de que al aceptar todo, había sido la firma de su condena. “En la casa de acogida me dijeron qué era lo que realmente tenía que hacer: convertirme en una prostituta. Aunque me opuse, me aseguraron que sabían en dónde vivía mi familia y que tenía que devolver S/15.000”.
Joanny es muy joven, la vergüenza de haber caído se apoderó de ella. Comenzaba uno de los capítulos más dolorosos de su vida. Pero sacó fuerzas y pudo enviar un mensaje de auxilio a un aplicativo de libertad en Colombia, y de inmediato se activó la alerta amarilla de Interpol.
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El 3 de julio, una brigada especial de la Dirección contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes, a cargo del general Carlos Malaver, inició la operación de rescate.
Primero procedieron a realizar la búsqueda por las plazas de explotación sexual. Fue así como obtuvieron información de que la menor se encontraba en una casa de acogida, ubicada en el pasaje Grau, mz. N, lote 18 de la asociación de propietarios Tarapacá, en Puente Piedra.
Cuando llegaron a uno de los departamentos del segundo nivel, encontraron a Joanny con dos adolescentes mujeres de 15 años y con Eliangy y Anís Yaribel, ambas de 21 años, todas de nacionalidad venezolana.
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Documento oficial. Foto: La República
Las menores de edad indicaron que habían llegado a Lima el 30 de junio procedentes de Venezuela, desde donde a través de unos “asesores” las habían hecho cruzar las fronteras de Colombia y Ecuador, pagándoles los pasajes y la alimentación con la promesa de que las traían para trabajar de meseras o anfitrionas en restaurantes o centros comerciales.
Buscan a Génesis
“Genesis Arianny Granadilla Alvarado, a quien todas dicen la Génesis, nos recibió en el terminal terrestre de Plaza Lima Norte y nos llevó a la casa de acogida”, relató Joanny.
“Ahí nos dijo que teníamos que realizar trabajos sexuales desde las 15:00 horas hasta las 02:00 horas del día siguiente en la plaza ‘Tottus’ de Puente Piedra y que debíamos entregar todo el dinero ganado como pago de una multa de S/15.000 por gasto de pasajes, alimentación, acogida, vestimenta y otros”, agregó la agraviada.
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Génesis era encargada de recoger diariamente el dinero y de haber alquilado el departamento donde fueron encontradas. Por otro lado, las mayores de edad señalaron que tenían dos meses trabajando sexualmente en la plaza de explotación ‘Tottus’. Génesis está no habida.
‘Los Gatos de Tocorón’
Dos meses antes, el 28 de mayo, la misma unidad policial detuvo a nueve integrantes de la banda criminal ‘Los Gatos de Tocorón’ y rescató a 13 mujeres adultas, venezolanas y peruanas que eran explotadas sexualmente en San Juan de Miraflores.
Uno de los extranjeros venía recibiendo llamadas y mensajes de WhatsApp del teléfono de J. S. C. T. (22), quien se encontraba en el hospital Dos de Mayo por un problema de salud y era vigilada por el venezolano José Crespo Esparragoza (24).
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Tras la detención de este último sujeto, fueron rescatadas una peruana y 12 venezolanas que eran sometidas por esta banda. Así Jhoselin, Yeimis, Sinai, Yuleidy, Airam, Carmen, J.S.C.T., Soleimy, Rosmarys, Klisbeth, Niurka, Valentina y Miguerlin recuperaron su libertad. De víctimas a supervivientes.
Datos
Casos. Alarmante. 29.400 casos de trata han sido registrados entre el 2018 y 2023 por el Ministerio Público (MP), informó CHS Alternativo.
Denuncias. Según esta misma entidad, 6.107 denuncias fueron registradas por el MP en el año 2022.
Víctimas. De acuerdo con la Policía Nacional, entre el 2017 y 2023 se registraron 3.612 víctimas de trata. El 85% son niñas, adolescentes y mujeres adultas.
‘Los Gatos de Tocorón’
Nueve integrantes de esta red criminal fueron detenidos y la PNP rescató a una peruana y 12 venezolanas en el sur de Lima.
